La posición de la PGDC en el FUM fue clara: La cultura y la diversidad cultural son fundamentales para la plena implementación del Derecho a la Ciudad. Ambas son fundamentales para la promoción de ciudades libres de discriminación, con igualdad de género y diversidad étnica, racial y social, y que mejoren los procesos democráticos participativos. Lea el documento de posición completo (en inglés).

La 10ª sesión del Foro Urbano Mundial (FUM) tuvo lugar del 8 al 13 de febrero de 2020 en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos. Al igual que en reuniones anteriores, los miembros y aliados de la Plataforma Global por el Derecho a la Ciudad (PGDC) participaron en el foro organizando diferentes actividades para defender el Derecho a la Ciudad como impulsor del desarrollo urbano sostenible e inclusivo.

El FUM se estableció en 2001 por las Naciones Unidas para hacer frente a la rápida urbanización y sus repercusiones en las comunidades, las ciudades, las economías, el cambio climático y las políticas. El tema de este año fue «Ciudades de oportunidades: Conectando la cultura y la innovación«, que se centró en los vínculos entre la urbanización, la cultura y la innovación como base para unas ciudades y asentamientos humanos inclusivos, seguros, resistentes y sostenibles.

Este tema está claramente relacionado con varios componentes del Derecho a la Ciudad y fue abordado tanto en las actividades organizadas por La PGDC en su conjunto como en las promovidas por sus miembros.

 

Actividades organizadas por la PGDC

Evento de capacitación organizado por la PGDC en el FUM10 en Abu Dhabi

Durante el FUM10, la PGDC promovió un evento de trabajo en red y un evento de capacitación, así como una reunión de su Grupo Facilitador. El primer evento tuvo lugar el 9 de febrero con la asistencia de más de 100 personas y se centró en el papel del Derecho a la Ciudad en la conexión de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Nueva Agenda Urbana en el marco de la promoción de los derechos culturales y la diversidad.

Tras un panel de debate en el que participaron Nelson Saule (Instituto Pólis), Amanda Flety (CGLU-CISDP), Olenka Ochoa (WPM Perú), Edmundo Werna (OIT) y Cathy Dijla (CODAS) y Fana Sihlongonyane (CUBES), siguió un debate abierto centrado en: cómo el derecho a la ciudad y la diversidad cultural contribuyen a la vitalidad, la prosperidad y la inclusión en el proceso de desarrollo de las ciudades; cómo pueden la cultura y la innovación contribuir a lograr los compromisos transformadores de la Nueva Agenda Urbana y cómo evitar que las ciudades y distritos regenerados no desplacen, marginen o borren el patrimonio cultural de los residentes actuales.

Al día siguiente, tuvo lugar el evento de capacitación, que se centró en cómo usar el Derecho a la Ciudad para lograr ciudades con diversidad cultural. Más de 50 personas asistieron a la sesión. El trabajo colectivo se centró en el mapeo de la diversidad cultural en las ciudades y en proponer acciones o iniciativas concretas para fomentar la diversidad cultural en cuatro ámbitos: cultura, espacios públicos, inclusión social y democracia. Algunas de las conclusiones del debate fueron la importancia de adoptar un enfoque transversal de género, así como la necesidad de contar con mecanismos de participación tanto para la gobernanza de los espacios públicos como para poner en marcha políticas e iniciativas para fomentar la diversidad cultural. Por último, hubo un acuerdo general sobre la importancia de traducir el Derecho a la Ciudad en iniciativas concretas que toquen la vida de los diversos habitantes de manera enriquecedora.

Una mirada crítica al FUM

La PGDC considera que el Foro Urbano Mundial es un espacio importante para promover el desarrollo urbano sostenible e inclusivo en el marco de la implementación de agendas globales como la Nueva Agenda Urbana y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Para ello, es fundamental contar con la presencia de una amplia diversidad de actores y organizaciones participando, así como con un conjunto diverso de narrativas y visiones de los desafíos actuales y alternativas posibles, dando prioridad a las voces de los grupos y comunidades tradicionalmente marginados y que viven en condiciones vulnerables. 

En este marco, la aparente sobrerrepresentación de actividades y stands que promueven el desarrollo de ciudades inteligentes y visiones correlacionadas del desarrollo urbano que a menudo ponen el lucro por encima de las necesidades de las personas representa una característica alarmante que queremos denunciar con fuerza. La concentración antidemocrática de los procesos de toma de decisiones, el papel destacado de las empresas de alta tecnología y los mecanismos de vigilancia integral que suelen ir unidos al mantra de las ciudades competitivas contrastan con la visión del Derecho a la Ciudad de «ciudades, pueblos y asentamientos humanos justos, inclusivos, seguros y sostenibles, definidos como bienes comunes esenciales para una vida plena y decente«.

Además, la decisión de celebrar el FUM10 en los Emiratos Árabes Unidos (EAU)  fue recibida con gran preocupación por los miembros de la PGDC debido a la evidente situación de discriminación desenfrenada, la falta de protección y unas condiciones de vida y de trabajo muy inadecuadas para las mujeres, niñxs y trabajadorxs extranjerxs dentro de los EAU. Nos sorprendimos al darnos cuenta de que durante el FUM10 las actividades se llevaron a cabo en total desconexión con la realidad local, sin ofrecer oportunidades de visibilizar las luchas locales y entrar en contacto con grupos sociales que luchan por proteger sus derechos humanos. Lea la nota completa del GPR2C sobre el Derecho a la Ciudad en los Emiratos Árabes Unidos (en inglés).